
Izuku es el mortal más hermoso que Shouto, dios del Sol, ha conocido.
Prendado y encandilado por su belleza e inocencia, Shouto ignorará los consejos que su hermana melliza, Momo, le ha dado, y le entregará su corazón a, lo que sus semejantes llaman, un simple mortal.
Aunque para Shouto era mucho más.