
Nose como caí tan bajo en esto, como me sedujo a su antojo en este lío de placer, lujuria y dolor. Me enredó en el lado oscuro de la sexualidad. Y jamas podré salir porque lo amo. Estaré atada a el toda mi vida.
Había reglas y yo rompí cada una de ellas por el, sabiendo las advertencias de los mas cercanos. Yo era nueva en aquél instituto cuándo lo conocí su cabello castaño oscuro y sus ojos claros, su sonrisa malvada y un nombre que jamas olvidare Pol Wolf.
Las reglas eran:
1-No lo mires directo a los ojos.
2-No lo hables sí él no té dirige la palabra.
3- Desviarse de su camino.
4- Y más importante »no té enamores de él«