
-¡Jason! -mi grito resuena en las paredes del baño- ¡Jason ven rápido idiota!
Escucho como se caen algunos platos al suelo. Ahí va más dinero gastado.
La puerta se abre. Jason me mira con los ojos muy abiertos.
-No me digas lo que creo que estoy pensado -murmura, mientras da un paso hacia el baño.
Con mi mano temblorosa, la pongo en frente de su cara. Él mira el test de embarazo y su cara se convierte en un papel.
-No... Puede... Ser -susurra.
-Oh sí. Estoy embarazada.